Secreto para escotes profundos y mi cita de San Valentin
Ayer fué el día de San Valentin, y pues yo soy tan boba como se lo puedan imaginar y me encantan las celebraciones y parezco un ponqué y por todo armo fiesta. El día de San Valentin no es la excepción, mucho mas aún si ayer estabamos celebrando un año desde que estoy comprometida con mi chico. Antes de pasar al cuento romanticón también hago un alto para contar que este día se celebra el primer aniversario de la partida de mi tia Carmen.
En medio de mi felicidad hace un año mientras llamaba a media noche a contarle la noticia a mi mamá mi tia nos decía adios. Yo hasta el momento no he podido aceptar las circunstancias de su partida,. Ha pasado mas de un año desde la última vez que fuí a Colombia y lo único que sé es que el día que vaya y vea a mi tio caminando por primera vez ante mis ojos sin ella se me va a venir el mundo encima. Personalmente el único consuelo que me doy es que ella se convirtió en ese angel cúpido que me flechó esa noche el corazón y a pesar de que no soy capaz de coger el teléfono para llamar a mi tio y decirle que ese amor que ellos se tuvieron es mas grande ante mis ojos que mil palabras de consuelo, lo hago de la única manera que soy capaz de hacerlo, escribiendo.
Ahora si volviendo al tema, mientras me limpio unas lagrimas de la cara quiero contarles como estuvo mi día. No vayan a creer que es que yo siempre he sido así toda cursi en esta celebración, la verdad no. Yo he andado en todos los bandos a través de los años, amargada, entuzada, solterita, situación complicada, plantada, indiferente, y demás. Pero también los años me han enseñado la importancia de celebrar cuando el resto de las personas celebran, y no porque así lo determina el mercado o la sociedad, sino porque existe una gran magia cuando las personas se reunen al rededor de un mismo sentimiento y esto lo aprendí el día que yo fuí una de las 1.8 millones de personas que se reunieron a recibir a Barack Obama como presidente de Estados Unidos en Washington D.C
La celebración la iniciamos en la mañana con desayuno en el mercado central, luego caminamos a una exposición de arte increíble llamada Break Bread de Scott Hove donde hay esculturas gigantes hechas de ponqué… si de ponqué…
Y obviamente yo tomando algunas fotos de street style!!
De allí me fuí a trabajar a Velazca Los Angeles, porque es el precio de vivir en este país, con celebración o sin celebración se trabaja o se trabaja. Después de trabajar fuí a alistarme para una noche especial.
El plan era ir a cenar a un restaurante francés que se llama Petit Paris. Fué una cena divina y mi chico me sorprendió con unos lindos aretes de regalo 😀
Luego fuimos a mi teatro favorito, el teatro de Los Angeles a ver la película de Moulin Rouge.
Yo se que suena como que ir a ver una película no es plan super especial, pero calma calma que esto se pone bueno.
Como íbamos a ver Moulin Rouge debía vestirme apropiadamente. Como ya les he comentado estoy desarrolando mi colección y en esta estoy trabajando con satin y sedas. Por tanto me he puesto en la tarea de usar sedas para entender este tipo de tela, y su comportamiento sobre el cuerpo, así que para esta especial noche con mi chico escogí un vestido de seda rojo de Naked Princess. Obviamente el vestido es totalmente revelador, a un evento de Moulin Rouge no se va muy tapada que digamos, por eso siempre insisto, la clave del estilo es saber que cada prenda tiene su momento apropiado.
Para lograr usar un escote de esta magnitud hay un secretito del cual nos valemos las asesoras de estilo “la cinta de ropa”. Es algo asi como cinta pegante pero el pegante esta por los dos lados. Con esta cinta se puede lograr pegar la tela a la piel y de esta forma que nunca se mueva, así de seguro no habrá ningún tipo de accidente. La cinta obviamente se las puedo enviar si no la encuentran facilmente, creo que voy a enviar unas para mi tienda Velazca en Colombia, si quieren comprar una me dejan un comentario para saber cuantas enviar. Un consejito extra es que en telas como la seda no vayan a cometer el error de usar ganchitos porque no hay forma de esconderlos y no se van a ver muy bien.
Todos el drapeado lateral que ven en el vestido yo se lo hice porque el vestido es totalmente recto y me parecía aburrido, así que espero les sirva de idea. Haber usado este vestido anoche me enseño muchas cosas y por eso ya tengo dibujado otro diseño de mi colección, tiene el mismo escote pero con una forma especial que hace ver la cintura y la cadera divinas.
El evento se llama cinespia, como pueden ver en las fotos. El concepto es ver películas pero en lugares especiales como cementerios o con temas especiales donde la gente se viste de acuerdo a la película que se va a presentar. Anoche fué una noche mágica me sentí literalemnte en Moulin Rouge. Todas las personas estaban vestidas de la época, habían bailarinas, trapecistas, mimos, magos y antes de la película se presentó nada mas y nada menos que “La Mano”.. la de los Locos Adams se acuerdan? Lo mejor de todo esto y es la razón por la que quiero dejar un mensaje es que estos eventos son super económicos y cuando digo económicos me refiero a que cualquier estudiante de universidad puede ir y disfrutar. Yo pienso que el apoyo al arte está en nosotros como ciudadanos. Personalemente prefiero pagar por una entrada a un evento como estos que pagar por una botella de trago. Creo que existen mil formas de cambiar la sociedad, con arte, con música, con deportes, cultura ciudadana y demás. Ojalá alguien se anime a tomar esta idea y la apliquen… que no diera yo por ver el Teatro Jauregui en estas 😀 a lo mejor cuando vaya lo hacemos no??? Por hoy me despido. Muchas gracias por leer y una vez mas nos quedamos conectados Hasta que la Moda nos Separe.